Logotipo de mi felicidad

Cómo Ser Feliz, Siete Consejos


¿Cómo puedo ser feliz? Todos nos hemos hecho esa pregunta alguna vez. Incluso aquellos que tienen una vida tranquila.

Pero cuando la tristeza invade nuestra mente, se convierte en algo difícil de abandonar.

En este post te daremos 7 consejos que te guiarán en el camino de alcanzar la felicidad, no son recetas mágicas, pero sí te ayudarán a sentirte mejor contigo mismo y mejorar tu vida.

1. Valora lo que tienes

Este es el primer paso para ser más feliz de lo que eras antes de leer este artículo.

Mira a tu alrededor y pon tu vista solo en las cosas buenas que tienes: familia, trabajo, inteligencia, amigos... Lo que sea.

Obvia las cosas malas, todas aquellas que te han hecho sentirte mal. Ahora mismo solo fíjate en las cosas buenas que tienes alrededor y que estás ignorando.

Hasta la persona más desafortunada del mundo tiene algo bueno cerca o en su interior. ¿Por qué tú no lo vas a tener?


2. Dale el valor exacto a los problemas que te afectan

Artículo relacionado: Cómo solucionar mis problemas.

Una de las principales causa de infelicidad son los problemas. Cuando se acumulan en un momento determinado puede parecer que nuestra vida es imposible de llevar.

Decía un proverbio chino:

"Si el problema tiene solución, ¿por qué te preocupas? Si el problema no tiene solución, ¿por qué te preocupas?"

Es bastante simplista pero tiene mucha razón.

El principal problema no es el problema en sí, si no como nos enfrentamos a él.

Podemos hacerlo de forma pesimista y decirnos cosas como ¿Por qué siempre me pasa a mí?, o cada vez que creo que mejoro siempre pasa algo; o por otra parte mirarlo como un reto, como obstáculos que siempre aparecerán y que debemos ir venciendo para mejorar.

Por eso nos gusta otro proverbio:

"No existen problemas, sólo son pruebas que hay que superar".

Ampliar información sobre este tema en: Cómo solucionar mis problemas.


3. Sal al aire libre

Cuando termines de leer este artículo (no lo dejes a medias) vístete y sal a caminar. ¿Hacia donde? Hacia ningún lado.

Camina sin rumbo, mirando lo que hay a tu alrededor, mirando las personas que se cruzan contigo, mirando las casas, los árboles, ¿desde cuándo no lo haces?

Uno de los peores enemigos de la alegría es estar solo dentro de casa. El sofá, el televisor son buenos compañeros cuando estamos cansados, pero son los peores amigos que podemos tener cuando estamos tristes.

En los momentos de tristeza las paredes de tu casa se convierten en los barrotes de una cárcel... ¡Rómpelos!

Sal a la calle, no solo hoy, si no todos los días. Empieza hoy a hacer ejercicio.

Camina todos los días al menos una hora, si no puedes, menos, pero camina, y verás como día a día te vas a sentir mejor físicamente y emocionalmente.


4. Desaste del pasado

El pasado, sobre todo las experiencias negativas, suele ser un lastre en el camino a la felicidad. Como buen capitán has de ir desprendiéndote de ese peso innecesario en tu vida para poder avanzar con rapidez hacia tu objetivo de ser feliz.

Nuestra vida está plagada de experiencias, muchas de ellas negativas, algunas muy dolorosas como la pérdida de un familiar querido, una ruptura sentimental, algún gran trauma emocional.

Son cosas muy difíciles de olvidar y que nos afectan durante mucho tiempo, a veces más de lo que marca la lógica.

No podemos pedirte que no estés triste días después de una separación dolorosa, pero sí que tienes que levantar la cabeza y seguir con tu vida, al fin y al cabo sigue adelante, te guste o no.

No puedes seguir cargando con ese dolor, pues no te beneficia en nada, ya pasó, no tiene arreglo y por mucho que busques soluciones, la mayoría de las veces no existen.

Por lo que solo te queda mirar hacia delante y concentrarte en tu futuro, en las cosas buenas que tienes a tu lado (recuerda el punto 1), asumir que lo perdido no tiene arreglo y meterlo en el saco de todas las cosas que se han quedado en el camino durante tu vida.

Al lado de tu primer juguete roto, del primer amor platónico, del primer beso o del primer familiar perdido. Ahí lo debes dejar y mirar hacia delante.


5. Plantea una meta

Mira hacia delante y ponte una meta, un objetivo. Algo difícil pero no imposible de alcanzar. Algo que te permita desviar tus pensamientos negativos hacia otra cosa, que te de pequeñas alegrías a medida que te acercas.

¿Cuál puede ser? Eso depende de ti. Terminar un curso de formación o una carrera universitaria. Competir en una maratón. Ayudar a otras personas a mejorar su vida. Escribir un libro o un blog, no tiene por que ser bueno (hasta nosotros lo hacemos).

Algo que te permita levantarte cada mañana, mirar atrás y ver donde estabas hace tres meses y donde estas hoy, algo que te permita darte cuenta de que avanzas, a tu ritmo, pero avanzas, y que a medida que avanzas aparecen nuevos retos que vencer.

De esa forma aprendes a enfrentarte a otros problemas (punto 2) y lidiar con ellos sin agobiarte.


6. Deja de quejarte y ríete de ti mismo

Todo pasa por alguna razón, dicen los sabios. Pero si al salir de casa un coche te llena de agua y barro, de que te sirve quejarte y maldecir tu suerte, no ganas nada, además, ¿crees sinceramente que eres tan importante como para que la naturaleza o los espiritus se pongan de acuerdo para hacerte daño?

No, eres una persona normal, importante para los tuyos y nada más.

Si estas lleno de barro es porque pasó un coche y te lo echó encima, no por otra razón. A partir de ese momento solo tienes que tomar dos decisiones, primero reírte de ti mismo (otros ya lo están haciendo) y después volver a casa a cambiarte.

Consejo: No pierdas la oportunidad de mirarte en el espejo, así siempre podrás reírte al recodarte.

Ya sabes, deja de quejarte y ríete de ti mismo. Cuando todo vaya mal, sonríe y susurrate: vaya basura de día estoy teniendo, sólo falta que... e imaginas otra cosa mala que podría pasarte.

Algo tan simple te ayudará a cambiar la perspectiva de tu vida, dejarás de ver todo negro y empezarás a disfrutar de las tonalidades de todos los colores (ver cómo atraer la buena suerte).

Además te percatarás que a veces esas cosas malas que te han pasado a la larga te han servido para que algo bueno suceda.


7. Multiplica, reconoce y disfruta de los momentos felices

El premio Nobel de Literatura, Jacinto Benavente dijo: La felicidad no existe en la vida. Solo existen momentos felices. Puede que sea cierto.

Por eso a partir de ahora intenta multiplicar esos momentos felices y, sobre todo, aprende a reconocerlos y disfrutarlos.

¿Cuantas veces has estado en un sitio agradable, con buena compañía y estás pensando en otra cosa? A veces dejas de disfrutar por darle vueltas a un problema o por estar pensando en cosas ajenas al instante que estás viviendo.

Evita eso. Intenta apreciar cada momento, no permitas que pensamientos negativos o problemas sin resolver te impidan disfrutar de un rato agradable.

Trata de vivir el día presente, el instante actual, ya tendrás tiempo de solucionar los problemas.

Este es nuestro último consejo: Multiplica, reconoce y disfruta los momentos felices. Recuerda, no vuelven a pasar.


Resumiendo: Cómo ser feliz

Esperamos haberte ayudado a mejorar tu felicidad con este artículo, además deseamos que nuestros consejos se traduzcan en una mejora de tu calidad de vida. Para que te sea más fácil recordarlos te los resumimos a continuación.

Cómo ser feliz


  • 1. Valora lo que tienes.
  • 2. Dale el valor exacto a los problemas que te afectan.
  • 3. Sal al aire libre.
  • 4. Desaste del pasado.
  • 5. Plantea una meta.
  • 6. Deja de quejarte y ríete de ti mismo.
  • 7. Multiplica, reconoce y disfruta de los momentos felices

Si te ha gustado... Compártelo.